Año hidrometeorológico 2010/2011: extremadamente seco

Ya se apuntaba hace algunos meses que este año batería récords negativos en lo referido a las precipitaciones y finalmente el final del verano lo ha confirmado. Durante el año hidrometeorológico 2010/2011  hemos visto reducido los registros pluviométricos de los años anteriores hasta la mitad o en algún caso hasta más de la mitad.

Como observamos en este gráfico a falta de completar el 2005/2006, año en que se inició la recogida de datos en este observatorio,  2007 es el único año hidrometeorológico que tiene unos registros pluviométricos que se acercan a los del presente año, con 672,68 mm. Cabe destacar que 2006/2007 y 2010/2011, tienen una diferencia especial y es que en noviembre de 2006 se registraron 335 mm. en un periodo de precipitaciones que ya analizamos en aquel momento, y que hasta el momento suponían que el año hidrometeorológico de dichos años se comportaran de forma muy similar al actual. Observando las precipitaciones acumuladas anuales el comportamiento no es tampoco muy diferente al actual, ya que en 2007 se registraron 975,85 mm., siendo los meses más lluviosos septiembre y octubre; y por el momento a falta de completar dichos meses en el presente ejercicio, los registros totales también son similares. 

En síntesis a falta de saber si el otoño del presente año se presenta más húmedo que lo que llevamos de año, podemos confirmar que el año hidrometeorológico y el año acumulado respecto a precipitaciones es un 57% más bajo que el periodo anterior y un 45% menos que si lo analizamos con respecto a la media.

En definitiva que esperamos un repunte en las precipitaciones durante los próximos meses, a estas alturas difícil de prever ya que sino, cabe esperar un empeoramiento de las reservas hídrológicas y la suma de una tendencia negativa que acarreamos desde 2009, en el que los registros anuales ya bajaron de los 1000 mm anuales y un 2010 que no superó los 710 mm  anuales y todo ello a pesar de que los registros hidrometeológicos han sido favorables hasta el actual, por tanto un motivo más de preocupación.